SUS OJOS

Nos miramos y en ese momento algo surgió entre nosotros, le devolví la mirada y él seguía mirándome insistentemente... me decían tantas cosas esos ojazos... ¿y sus labios?, ¿que decir de sus labios?... jugosos, brillantes (por húmedos), la boca entreabierta, como a punto de pronunciar palabra, o eso creí... cuando en el momento de ofrecerle la más cálida de mis sonrisas... me ofreció su mano.

Sí, su manita, esa en la que llevaba un trozo de pan chuperreteado , baboseado y que me ofreció, yo hice el teatro de simular que le cogía un trozo y me lo comía, expresándole un "mmmmm que bueno está", él amagó una semisonrisa y su mamá me dijo : "le has gustado", yo sonriendo le pregunté ¿tú crees?, a lo que ella me contestó " y tanto, ni te imaginas lo que les cuesta a las enfermeras y fisioterapeutas del centro de estimulación que les deje hacer su trabajo con él, se cierra en banda y nada..."

En ese momento volví a mirarle a esos ojos tan maravillosos y él me correspondió, había soltado el trozo de pan y agarraba , tirando de mi falda con la única manita que podía mover. Me agaché y no pude reprimir pellizcarle la manita y besarle... él me ofreció la carita y posó sus grandes ojos en los míos... supe en ese momento , que ya sería imposible dejar de mirarlos.

Desde entonces, hace ya casi dos años, voy cada sábado que puedo a colaborar como voluntaria a ese centro , veo sus ojazos y avanzamos jugando, sus logros los siento un poco míos, ya casi utiliza los dos brazos por igual, ya pestañean facilmente sus grandes ojos, ya casi puede sonreir...y esa media sonrisa me da fuerzas para soportar toda una semana por muy difícil que me la quieran poner.
Besos:))))